Centro del Apostolado Católico
  • Inicio
  • ¿QUIÉNES SOMOS?
    • Misión
    • Santos Patronos
    • Director
    • Personal y Colaboradores
    • Directivos y Asesores
    • Afiliados
  • Blog
  • Boletín
  • Recursos
  • Recursos de Cuaresma y Pascua
  • Recursos sobre COVID-19
  • Mujeres Católicas
  • Seminarios Web
  • Contacto
    • Notas de Prensa
    • Archivos del Boletín de Información
    • Regístrate en Nuestro Boletín
  • English Website

Convirtiendo como Agustín

28/8/2018

0 Comentarios

 
Imagen
Cuando escuchas el nombre de San Agustín, ¿qué es lo que piensas? Probablemente algo sobre las Confesiones, posiblemente su obra más famosa. O tal vez recuerdes que él es uno de los primeros doctores de la Iglesia. Pero, ¿sabes de su viaje espiritual desde el hedonismo juvenil hasta el teólogo prominente?

 San Agustín nació a mediados de los 300 en el norte de África de una madre cristiana y padre pagano. Inicialmente educado en la retórica, cuando era adolescente, Agustín adoptó una vida de vicios cómodos, que describe en su obra autobiográfica y filosófica Confesiones. Finalmente, sus búsquedas intelectuales lo conducen a Europa, dentro y fuera del maniqueísmo (una religión dualista basada en la razón pura), y de vuelta a la religión de su infancia. A través de la obra evangelizadora de San Ambrosio, Agustín finalmente fue bautizado en la fe cristiana a los 30 años. Luego se convirtió en uno de los filósofos más importantes de la Iglesia primitiva.

 Para los católicos de cuna como yo, nuestros caminos de fe no son tan dramáticos como la conversión de San Agustín desde joven corrupto a médico de la Iglesia. ¡Sin embargo, siempre hay oportunidades para la conversión diaria! El adolescente Agustín rezaba: "Dame castidad y continencia, solo que no todavía". ¿Con qué frecuencia nos vemos rezando en una línea similar? "Dame templanza, pero no hasta que haya comido tres paquetes de Oreos"; "Dame un mayor deseo de orar, pero tal vez no hasta la próxima semana, cuando termine de ver este programa de televisión". Al igual que Agustín, constantemente nos encontramos luchando con nuestras debilidades humanas y nuestro deseo de hacer las cosas en nuestra propia línea de tiempo en lugar de la de Dios.

 Pero incluso mientras luchamos para superar nuestros vicios, Dios nos acerca a Él, tomando nuestros pasados ​​fracturados para crear un todo hermoso. Los tratados teológicos y filosóficos de San Agustín quizás no habrían sido tan fervientes o persuasivos si no hubiera abrazado previamente tan mal la filosofía antes de su conversión. Su educación secular y su entrenamiento en retórica y filosofía platónica lo prepararon para su trabajo defendiendo la verdadera teología cristiana y refinando su filosofía, tanto que es reconocido como uno de los doctores originales de la Iglesia. Mucho antes de que Agustín aceptara por completo la fe cristiana, Dios ya lo estaba preparando para su futuro papel como obispo y filósofo. Del mismo modo, nuestro pasado no restringe nuestro futuro. Las opciones que terminaron conduciéndonos aparentemente en ninguna parte, períodos de duda o conflicto: Dios puede tomar estos momentos de debilidad humana y usarlos para acercarnos a Él. Al igual que San Agustín, incluso una década previa de promiscuidad podría recordarnos cuán vacía es una vida que no se vivió para Cristo.
​
 San Agustín es la prueba viviente de que nadie, sin importar cuán aparentemente corrupto, cuán espiritualmente perdido o cuán confundido sea moralmente está más allá del poder de la gracia de Dios. En la fiesta de San Agustín, consideremos dónde estamos en nuestros caminos de fe. ¿Dónde hay espacio para la conversión diaria? ¿Cómo podemos aprender de nuestros fracasos pasados ​​para abrazar más plenamente un futuro vivido con Cristo?
 
Pregunta para la reflexión: ¿Qué falla puedo usar de mi pasado para construir mi relación con Cristo?
Imagen

Helena Romano es Asociada Editora del Centro de Apostolado Católico.

0 Comentarios



Deja una respuesta.

    Archivos

    Septiembre 2022
    Julio 2022
    Marzo 2022
    Noviembre 2021
    Abril 2021
    Diciembre 2020
    Noviembre 2020
    Abril 2020
    Marzo 2020
    Febrero 2020
    Enero 2020
    Diciembre 2019
    Noviembre 2019
    Octubre 2019
    Septiembre 2019
    Agosto 2019
    Julio 2019
    Junio 2019
    Mayo 2019
    Abril 2019
    Marzo 2019
    Febrero 2019
    Enero 2019
    Diciembre 2018
    Noviembre 2018
    Octubre 2018
    Septiembre 2018
    Agosto 2018
    Julio 2018
    Junio 2018
    Mayo 2018
    Abril 2018
    Marzo 2018
    Febrero 2018
    Enero 2018
    Diciembre 2017
    Noviembre 2017
    Octubre 2017
    Septiembre 2017
    Agosto 2017
    Julio 2017
    Junio 2017
    Mayo 2017
    Abril 2017
    Febrero 2017
    Diciembre 2016
    Octubre 2016
    Septiembre 2016
    Agosto 2016

    Categorías

    Todo

    Canal RSS

Sobre el Centro del Apostolado Católico
Donaciones
CONECTATE CON NOSOTROS
Blog | eBook | Podcast
© 2024 Centro del Apostolado ​Católico
regístrate en nuestro boletín
Contáctanos
  • Inicio
  • ¿QUIÉNES SOMOS?
    • Misión
    • Santos Patronos
    • Director
    • Personal y Colaboradores
    • Directivos y Asesores
    • Afiliados
  • Blog
  • Boletín
  • Recursos
  • Recursos de Cuaresma y Pascua
  • Recursos sobre COVID-19
  • Mujeres Católicas
  • Seminarios Web
  • Contacto
    • Notas de Prensa
    • Archivos del Boletín de Información
    • Regístrate en Nuestro Boletín
  • English Website