
«La alegría del cristiano brota de la escucha y de la aceptación de la Buena Noticia
de la muerte y resurrección de Jesús: el kerygma».
Por eso, en esta Cuaresma 2020 quisiera dirigir a todos y cada uno de los cristianos lo que ya escribí a los jóvenes en la Exhortación apostólica Christus vivit: «Mira los brazos abiertos de Cristo crucificado, déjate salvar una y otra vez.
-Mensaje Cuaresmal del papa Francisco